Autoestima: cómo se construye y por qué es clave para la salud mental

Autoestima, Psicología General

Frecuentemente el concepto de autoestima se interpreta de forma simplificada, relacionándose directamente con una sensación de bienestar personal. No obstante, esta idea implica mayor complejidad que una evaluación positiva de un@ mism@. La autoestima se fundamenta en la capacidad de reconocer tanto las propias fortalezas como las debilidades, aceptando estas últimas como elementos de nuestra identidad personal.

Forjar una autoestima saludable requiere tiempo y constancia, ya que no se trata de una cualidad innata, sino que es un proceso que comienza a formarse en la infancia y continúa desarrollándose a lo largo de la vida, adaptándose a nuestras experiencias, relaciones y aprendizajes.

Una percepción aceptada de nosotros mism@s depende de múltiples factores. Ya desde la niñez, se inicia la construcción de la autoestima cuando el trato recibido por parte de nuestras figuras de referencia nos trasmiten mensajes de confianza, apoyo y validación. Sin embargo, la crítica constante o la indiferencia de nuestros referentes, pueden generar inseguridad y una valoración personal negativa. Esta base emocional fundada en la infancia, puede transformarse y/o consolidarse a lo largo de la vida, ya que las experiencias personales siguen moldeando la autoestima. Alcanzar metas, superar dificultades o recibir reconocimiento refuerza la aprobación de un@ mism@, mientras que los fracasos continuos o las relaciones tóxicas pueden afectarla profundamente, especialmente si no se cuenta con los recursos emocionales necesarios para afrontarlos de manera saludable.

Por otro lado, no solo las vivencias son fundamentales para desarrollar la autoestima, otro factor clave es el diálogo interno, la forma en la que nos dirigimos a nosotr@s mism@s influye directamente en nuestra percepción. Si utilizamos frases negativas para hablarnos, deterioramos nuestra autoestima, mientras que si utilizamos un lenguaje más compasivo y realista para comunicarnos con nosotr@s mism@s podemos reforzarla. Asimismo, compararnos constantemente con los demás puede afectarnos negativamente si no es desde una perspectiva crítica y se ignora la propia valía. Ignorar nuestras cualidades y logros frente a los de otros puede perjudicar nuestra confianza y autoimagen.

En este sentido, la autoestima resulta ser un pilar fundamental para la salud mental, ya que determina cómo nos vemos, cómo gestionamos nuestras emociones y cómo nos relacionamos con el entorno. Una autoestima saludable promueve el bienestar emocional, refuerza la resiliencia y permite establecer relaciones más sanas y equilibradas. Por el contrario, una autoestima baja puede aumentar la vulnerabilidad a sufrir depresión, ansiedad, adicciones y otras conductas perjudiciales.

Por todo ello, es fundamental reconocer nuestro valor, aceptar nuestras virtudes y defectos, hablarnos con respeto y ser compasivos con nosotr@s mism@s. Estas conductas no sólo mejoran nuestra salud mental, sino que también nos permite vivir con mayor equilibrio, seguridad y bienestar emocional.

Si sientes que necesitas apoyo para trabajar en tu autoestima o en cualquier aspecto de tu bienestar psicológico, en TuMente Psicólogos estamos para acompañarte. Nuestro equipo de profesionales puede ayudarte a construir una relación más sana contigo mism@ y a desarrollar las herramientas necesarias para vivir con mayor confianza.

Post Relacionados